Una marcha significativa por la Naturaleza en la Ciudad de México

UNA MARCHA SIGNIFICATIVA

Este lunes 1 de septiembre, unas mil personas marchamos varias horas; somos parte de diversos grupos que luchamos contra los basureros, rellenos sanitarios, plantas de tratamiento de basura, confinamientos de residuos tóxicos, descargas a ríos o arroyos de aguas contaminadas, construcción de gasolinerías, carreteras de libramiento, supercarreteras, casas GEO, ARA, HOMEX, etc, líneas de Metro, supervías de peaje, operaciones mineras, presas y otros megaproyectos, en diversas partes de México. Marchamos de la rectoría en Ciudad Universitaria a las puertas de la Comisión Nacional del Agua en la Av Insurgentes Sur y de alli a la SEMARNAT. Frente a SEMARNAT, varios oradores denunciaron la política económica y ambiental de Felipe Calderón, mientras otros denunciaron a Marcelo Ebrard, a Peña Nieto y a otros gobernadores. Es virtualmente unánime el repudio al Gobierno Federal, como a los gobiernos estatales, de cualquier partido.

Destacaron los grupos que defienden la laguna de Acuitlapilco en Tlaxcala, los representantes de los pueblos de Morelos, el movimiento contra el confinamiento de basura en Loma de Mejía en Cuernavaca, el movimiento contra la supercarretera Lerma- Tres Marías, el movimiento contra la Minera San Xavier, el movimiento en El Salto Jalisco, contra la contaminación de los ríos Lerma y Santiago, el movimiento nacional contra la privatización del agua, el movimiento contra la Línea 12 del Metro a Tlahuac y contra la Supervía del Poniente; participó un alegre y nutrido contingente de estudiantes de las facultades de Ciencias y de Economía de la UNAM y participaron algunos grupos ambientalistas y ecologistas. Llevamos la manta de EDENAT: ALTO A LA DESTRUCCIÓN DE LA NATURALEZA, utilizada en el Foro Social Mundial.

Esta marcha es muy signficativa ya que revela la creciente numero de conflictos ambientales en México, debido entre otras causas, a la debilidad del Gobierno Federal frente a los inversionistas extranjeros, a la parálisis cívica de una gran parte de la sociedad mexicana, al fracaso en la formación de valores trascendentales de las instituciones educativas de todos los niveles y de todo tipo , a la caducidad de las tecnologías utilizadas en la gestión del agua, de los residuos, de la movilidad, de la energía, de la urbanización y a la inutilidad de las instituciones nacionales para la defensa de la naturaleza. También es muy signficativo que los movimientos ambientalistas locales comiencen a unirse en México. El país sufre una gran embestida contra los dones de la naturaleza y contra las culturas locales, por parte de los grandes empresarios, sin que reaccione la mayor parte de la sociedad. La prisión del consumo y el trabajo paraliza a una gran parte de la sociedad mexicana. La Economía se impone con brutalidad sobre la Ecología y sobre la Sociedad en todos los rincones del país. Los valores dominantes en México imponen la destrucción y la muerte; nos acercan al Apocalipsis.